Tony Condorito Jr.

"Uno no puede dar tristeza, o entrar a la pista con tristeza porque le duele un diente. Aunque detrás de las cortinas uno caiga desmayado, pero en la pista hay que hacer reír a la gente.  Difícil misión, pero uno se acostumbra y al final es bonito".

"En todo lugar hay un payaso, en la oficina, en la cancha de fútbol. Yo pienso que todos tenemos un payaso dentro de nosotros que está muy escondido, y a veces uno lo saca. Pero uno tiene que saber sacar un chiste en el momento adecuado. Porque uno es alegre, igual que el payaso, tiene tristezas, igual que el payaso y tiene problemas igual que el payaso".

"El Tony chileno tiene esas ganas de andar payaseando. No es sólo una pintada bonita, una peluca, y que no se tiren al suelo.  No, el payaso chileno se tira al suelo, le llega un puntapié, se levanta. Acá si hay barro, tiene que tirarse al suelo igual, embarrado, mojado, al aserrín, ¡vamos!  Eso tiene el payaso chileno, va con las ganas de hacer las cosas bien. Saber hacer cascadas, caer al roll, todo eso. Y lo principal, entrar con ganas a trabajar, porque si no, la gente se da cuenta. Son cosas que se van logrando con el tiempo".